Atacaron a balazos una estación de servicio en Rosario

El establecimiento pertenece a Daniel Giribone, referente de la Cámara de Estacioneros de Rosario, quien dijo estar desconcertado por el hecho ya que no recibió advertencias ni amenazas
Otra balacera se registró en las últimas horas en Rosario. La estación de servicios ubicada en San Martín y Saavedra, en la zona sur, fue blanco de un violento ataque. Tres vidrios del frente del negocio fueron perforados por los disparados por dos hombres que iban en moto. A pesar de la ferocidad del ataque no se registraron personas heridas. Todo quedó registrado en video.
No es cualquier estación de servicio. El propietario del surtidor es Daniel Giribone, referente de la Cámara de Estaciones de Servicios de Rosario, quien este miércoles no podía salir de su asombro por el episodio que le tocó vivir con su negocio.
El empresario aseguró que no hubo una intimidación previa -como ocurrió en otros rubros como las concesionarias de autos- y que se sentía desconcertado. “Nunca pensé que iba a terminar hablando de esto”, expresó.
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En declaraciones al programa “El primero de la mañana” de LT8, Giribone contó que anoche, a la hora del ataque, se encontraba en su negocio de casualidad ya que ese no es su horario más habitual. “Fui a apagar el generador de energía porque habíamos sufrido un corte grande de luz. A las doce menos diez, pasaron dos personas en una moto, uno con casco y el otro no. Con una mochila de Pedidos Ya, arma en mano, tiró todo contra la estación”, recordó.
Desconcierto
“Yo estaba en la playa y ante los disparos salí corriendo para el otro lado”, admitió. “Rompieron todos los vidrios, agujerearon las chapas. Adentro rompieron la barra”, detalló.
“Nunca pensé que iba a terminar hablando de esto en los medios de comunicación. Esto supera mi poder de asombro”, manifestó. Según constató la policía, en el lugar se levantaron cinco vainas servidas, pero para Giribone fueron “siete disparos”.
El empresario negó que tenga algún problema que pueda derivar en una reacción de ese tipo, lo descartó de plano. “De ninguna manera. No hubo nada previo, ni mensaje, ni amenaza. Esa es mi desesperación, porque no veo las intenciones. Esto parece un hecho más de inseguridad, no lo asocio a nada. No me da la cabeza para pensar que alguien haya tenido esa reacción por algo. Los delincuentes están filmados por las cámaras y todo está en manos de la policía”, subrayó.