Insólito
Coronda: un preso se tragó una bombilla y terminó en el hospital
/https://notifecdn.eleco.com.ar/media/2025/08/preso_se_traga_bombilla_1.jpeg)
La noche del domingo, un interno del Pabellón de Aislamiento sufrió fuertes dolores después de ingerir una bombilla metálica y fue derivado a un hospital para estudios.
La noche del domingo en la cárcel de Coronda tuvo un episodio tan extraño como preocupante. Cerca de las 23, un interno alojado en el Pabellón de Aislamiento Provisional comenzó a quejarse de fuertes dolores estomacales y pidió atención médica urgente.
El preso, identificado como R.O.F., alojado en la celda N° 06, fue asistido de inmediato por personal penitenciario. Según trascendió, el hombre había ingerido una bombilla metálica, lo que le provocó un severo malestar abdominal.
Atención y traslado
El jefe de vigilancia de turno dispuso el traslado del recluso hasta el servicio médico de la unidad. Allí, los profesionales lo revisaron y determinaron que debía ser derivado a un hospital para una mejor atención y estudios más exhaustivos.
/https://notifecdn.eleco.com.ar/media/2025/08/preso_se_traga_bombilla_2.jpeg)
El procedimiento se realizó bajo estrictas medidas de seguridad, con cobertura de agentes de Seguridad Externa. Tras la evaluación inicial, se programó su derivación al nosocomio para la mañana siguiente.
Regreso a su celda
Tras recibir la atención de urgencia, el interno fue reintegrado a su lugar de alojamiento, donde permanece bajo observación.
Puede interesarte
La situación fue informada a las autoridades de turno y al jefe de día, mientras se aguarda el parte médico definitivo que confirme su evolución.
Si bien el caso sorprende por lo inusual del objeto ingerido, en el Servicio Penitenciario provincial no son desconocidos los episodios donde internos se provocan lesiones o ponen en riesgo su salud.
/https://notifecdn.eleco.com.ar/media/2025/08/preso_se_traga_bombilla_3.jpeg)
En algunos casos, se trata de intentos de autolesión; en otros, de conductas destinadas a forzar traslados o salidas momentáneas a hospitales.
En los últimos años, en unidades como Coronda y Las Flores se registraron incidentes que incluyeron ingesta de objetos cortantes, clavos, tornillos e incluso partes de radios o ventiladores.
Estos hechos no solo comprometen la salud del recluso, sino que generan operativos médicos y de seguridad de alto costo para el sistema penitenciario.