Crece la demanda por la vacuna de la fiebre amarilla
Se da entre turistas que viajan a Brasil.
Cerca de mil personas concurrieron hoy al Hospital Posadas, en la localidad bonaerense de El Palomar, en busca de vacunas contra la fiebre amarilla, una situación similar a la que se vivió ayer en la sede de Sanidad de la Frontera del barrio porteño de La Boca, mientras centros privados informaron que ya no tienen dosis.
“Recorrí un montón de hospitales de Tigre y centros vacunatorios privados y no hay más vacunas. Me dijeron que hasta febrero no va a haber”, dijo a Télam José, de la localidad del norte bonaerense, quien tras enfrentar una larga fila con su esposa en la puerta del Posadas consiguió uno de los 200 turnos otorgados para vacunarse el próximo martes.
El centro de salud público aplicó esta jornada la vacuna a 300 personas, de las casi mil que comenzaron a llegar en la madrugada, en su mayoría turistas que viajarán a Brasil, y frente a la demanda explosiva entregó 200 números para el martes y otros tantos para el jueves; además informó que recién volverá a otorgar turnos el próximo sábado.
Fuentes médicas en el lugar aseguraron a Télam que desde la semana pasada aumentaron la cantidad habitual de 150 dosis a 300 en medio de la gran cantidad de personas que buscan inocularse antes de partir a Brasil, donde se verificó un fuerte aumento de casos en San Pablo, Minas Gerais y Río de Janeiro.
Al menos 15 personas murieron por fiebre amarilla en Minas Gerais, el segundo estado más poblado de Brasil y el más afectado por la enfermedad, pero también se registraron víctimas fatales en Rio de Janeiro y Sao Paulo.
Otra de las preocupaciones de quienes se acercaron al Posadas fue saber si podrán vacunarse el martes debido a que ese día está programado un cese de tareas en el hospital por un reclamo gremial a raíz de despidos, pero fuentes consultadas por Télam dijeron que en ese caso atenderá la demanda el personal jerárquico.
En la fila que daba varias vueltas frente al vacunatorio y se expandía por el sector de estacionamiento del hospital, había personas que llegaban desde distintas zonas del conurbano, desde Pilar y Escobar hasta Lomas de Zamora, entre los cuales un matrimonio que llegó desde La Pampa a Buenos Aires en busca de la vacuna.
Pese a que hay que vacunarse 10 días antes de viajar a los centros turísticos, muchos pedían la dosis igual sin conocer ese requisito, como el caso de Natalia que consiguió turno para el próximo martes, el mismo día que viajará a Brasil.
En tanto, los centros privados de referencia de la ciudad de Buenos Aires no disponen de vacunas para prevenir la fiebre amarilla, las que volverán a recibir a mediados de febrero, según un relevamiento realizado hoy por Télam.
“Ya no disponemos de stock a causa de la demanda inusual de esta vacuna debido a hechos de público conocimiento”, informó en su sitio web el centro privado Vacunar.
De igual forma, Stamboulian explicó en su página que “debido a la demanda totalmente extraordinaria registrada durante diciembre y enero, esta vacuna se encuentra en falta en todos nuestros centros”, y tanto allí como en Previvax informaron a Télam que las nuevas dosis llegarán a mediados de febrero.
Por su parte, el ministerio de Salud de la Nación informó hoy en un comunicado a las líneas aéreas que operan con Brasil que ese país no solicita el certificado de vacunación contra la fiebre amarilla para el ingreso de viajantes.
La fiebre amarilla viral se transmite por la picadura de un tipo de mosquito, que previamente ha picado a una persona enferma, en general son del género Aedes (los mismos que transmiten los virus de Zika, la fiebre chikungunya y el dengue), y los mosquitos Haemogogus, que se encuentran sobre todo en la selva.
Se llama fiebre amarilla porque a muchos de los que se enferman se les pone la piel de ese color (ictericia), y los síntomas iniciales pueden ser similares a los de una gripe e incluir fiebre, dolor de cabeza, vómito y dolores musculares, mientras que a medida que la enfermedad progresa sangran las encías y la orina también contiene sangre.
Según datos del ministerio de Salud no hay un tratamiento específico para la enfermedad, si no que se atacan los síntomas, pero debe existir una consulta médica ya que puede agravarse y provocar la muerte.
Para dudas o consultas sobre fiebre amarilla se puede consultar a la línea 0800-222-1002.
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