Desbaratan cuatro fiestas clandestinas en la provincia

La Policía de Santa Fe intervino en tres fiestas que se realizaban en Reconquista, Casilda, Vera y en otra que se encontraba en etapa de planificación, en San Gregorio.
Más de 80 personas fueron advertidas de su accionar peligroso. A todas ellas se les solicitó que regresen a sus hogares. Además, tres hombres fueron identificados por ser los organizadores.
En todos los casos, se violaban las medidas de aislamiento social preventivo y obligatorio establecidas ante la pandemia por Covid19 y ordenadas por el gobierno nacional. Se le dio intervención a las autoridades judiciales correspondientes.
En primer lugar, agentes de Reconquista (Departamento General Obligado) se hicieron presentes en Calle 56 al 2300 del Barrio Belgrano, donde se realizaba una fiesta con aproximadamente 30 personas. Por este motivo, personal municipal labró acta de infracción y clausura del salón de comidas.
Por otro lado, personal policial de Casilda (Departamento Caseros) se hizo presente en calle Maipú al 2700, donde se estaba desarrollando una fiesta. Cuando los agentes llegaron allí fueron agredidos por las personas que participaban del evento, quienes arrojaron elementos contundentes. Rápidamente, los uniformados controlaron la situación y detuvieron a 22 personas, entre estas 16 menores de edad. Cabe agregar que resultaron lesionados con carácter leve tres efectivos policiales y dañadas las dos unidades móviles y un auto marca Peugeot 206 que estaba estacionado. También se incautaron cuatro motos y una bicicleta.
Policías de la Comisaría 1a de Vera y de Comando Radioeléctrico se hicieron presentes en una casa de calle A. Lezama y acceso a Hipódromo, donde se estaba desarrollando una reunión con expendio de bebidas alcohólicas. En el lugar fueron identificadas y trasladadas 30 personas.
También efectivos de la Comisaría 15a de San Gregorio (Departamento General López) tomaron conocimiento de que estaba circulando por WhatsApp una invitación a una fiesta de disfraces en un domicilio de calle Rivadavia al 500. Por este motivo, los agentes se acercaron allí para evitar que se concretara la reunión y dieron con dos hombres. Al entrevistarlos, manifestaron que llegaron en un remís desde Alberdi, Provincia de Buenos Aires, a comer un asado, pero que el dueño no se encontraba en ese momento. Por este motivo, se trasladó a los sujetos a la sede policial para continuar con la investigación.