Dos chicos de 14 años fueron detenidos por el asesinato del jubilado
Francisco Vázquez, de 87 años, fue atacado a golpes en su casa. Dos de las cuatro personas aprehendidas son menores.
Otro crimen y otra vez menores de edad en la mira de la Justicia como presuntos responsables del asesinato. Un jubilado de 87 años fue asesinado en su casa de la localidad bonaerense de Villa Ballester, partido de San Martín. Los investigadores detuvieron a cinco personas por el hecho. Dos tienen 14 años y son inimputables de acuerdo a las leyes penales vigentes en la Argentina.
La semana pasada un joven de 15 años señalado como el asesino de Brian Aguinaco fue liberado por no alcanzar la edad necesaria de 16 para ser susceptible de un proceso penal. Fue enviado junto a su familia a Perú. El caso desató una fuerte polémica sobre la necesidad de modificar el régimen penal juvenil.
El ministro de Justicia y Derechos Humanos, German Garavano, adelantó que la intención del Gobierno es que pueda imputarse a menores desde los 14 cuando se trate de casos graves como homicidios, violaciones y delitos con armas.
La víctima de este caso fue identificada como Francisco Vázquez. El anciano fue atacado a palazos y su cuerpo, ensangrentado, fue arrastrado con una extrema crueldad por su modesta casa de la calle Formosa 5566.
Junto a los dos menores cayeron también un joven de 16 años -puede ser imputado bajo un régimen especial-, y dos adultos de 41 y 44. En la vivienda de uno de los chicos de 14 fueron confiscadas vestimentas ensangrentadas del jubilado y la cédula de identidad de la víctima, quien era bailarín de tango.
Fuentes policiales reportaron que el jubilado “tenía problemas con uno de los chicos”, quien ya había “amenazado y golpeado” al bailarín el año último por causas que se desconocían. Los adultos fueron identificados como Pablo López (41) y Elio Domínguez (44).
La víctima fue encontrada por una mujer que cuidaba por horas al jubilado, con “lesiones graves en el rostro y la cabeza”, tras lo cual fue trasladado a la clínica Santa María, de Villa Ballester, donde falleció a raíz de las heridas.
Quedaron a cargo de las actuaciones del caso policías de la comisaría novena y personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) el fuero Penal y Juvenil de San Martín.
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