KIRCHNER APUNTÓ AL APOYO CIVIL Y DE LA IGLESIA EN LOS GOLPES
Al cumplirse 30 años del inicio de la última dictadura, el presidente Néstor Kirchner apuntó por primera vez al apoyo civil y al de la Iglesia en la interrupción de los procesos democráticos. Durante un emotivo acto en el Colegio Militar de la Nación, declaró “nunca más al golpe y al terrorismo de Estado”, rindió homenaje a los 30.000 desaparecidos y pidió a la Justicia que “proceda a fondo” para declarar la inconstitucionalidad de los indultos otorgados por Carlos Menem a los máximos jefes del régimen.
Advirtió que “no puede haber reconciliación mientras queden resquicios de impunidad”, repudió fuertemente el accionar de los represores y el apoyo que tuvieron en algunos sectores de la sociedad y reivindicó la resistencia de las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo.
Señaló que “no todos han reconocido sus responsabilidades” y enfatizó que “sectores de la sociedad, la prensa, la Iglesia y la clase política tuvieron también su parte” en el golpe. También consideró que el ex ministro José Martínez de Hoz debería haber sido “castigado” por el plan económico que implementó durante el gobierno de facto. Tras esas palabras, grupos de choque se movilizaron hacia el edificio donde vive Martínez de Hoz para producir destrozos (ver página 4).
Acompañado por su esposa, Cristina Fernández de Kirchner; el vicepresidente, Daniel Scioli, su gabinete en pleno, 14 gobernadores (entre ellos Jorge Obeid) y decenas de legisladores y representantes sindicales y sociales, el jefe de Estado encabezó la ceremonia central por el 30º aniversario del golpe del 24 de marzo del 76.
Las recordaciones se iniciaron el jueves con una vigilia de las Madres de Plaza de Mayo frente a la Casa Rosada y continuó ayer con distintos actos y marchas en todo el país.
Frente a la conducción de las tres Fuerzas Armadas y algunos representantes de organismos de derechos humanos, como Hebe de Bonafini, Kirchner descubrió una placa con la leyenda: “Nunca más golpe y terrorismo de Estado; por siempre respeto a la Constitución nacional. Verdad y justicia”, que será colocada en el Edificio Libertador la próxima semana.
Tras un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas de la dictadura, el jefe de Estado denunció que el gobierno que derrocó a María Estela Martínez de Perón implementó “un plan sistemático y coordinado de exterminio” y dijo que “la principal destinataria del terror organizado fue la sociedad.
Aunque recalcó que fue “un plan criminal”, Kirchner consideró que no deben existir “odios ni venganzas”, pero advirtió que “con el olvido no se saciará la sed de verdad”. Luego subrayó que “no puede haber convivencia en paz ni reconciliación mientras queden resquicios de impunidad” porque “sólo castigando a los culpables se liberará de culpa a los inocentes”.
Pidió a la sociedad “una reflexión crítica por esta gran tragedia” porque “aquel golpe no se redujo a un fenómeno producido por las Fuerzas Armadas” ya que “algunos golpearon las puertas de los cuarteles” para que los militares tomaran el poder.
Kirchner subrayó que los poderes económicos actuaron en algunos casos para debilitar las instituciones democráticas y repudió enfáticamente el modelo económico y social aplicado por la dictadura, que -sostuvo- “tuvo un cerebro cuyo nombre nunca tenemos que borrar: José Alfredo Martínez de Hoz”.
“Lamentablemente, los verdaderos responsables de ese plan económico no recibieron castigo”, afirmó y dijo que sus principales lineamientos fueron aplicados en la década del 90.
Kirchner rechazó las leyes de punto final y obediencia debida dictadas durante el gobierno de Raúl Alfonsín y consideró que la Justicia es la que debe “desarticular la red de impunidad de los indultos”.
“Espero, como reclama la sociedad, que la Justicia determine la validez constitucional o, como pienso yo, la inconstitucionalidad de los indultos”, aseveró el presidente, tras desechar la vía del decreto (ver aparte).
Finalmente, reconoció “el tremendo valor” de las Abuelas y las Madres de Plaza de Mayo y sostuvo que “fueron la verdadera resistencia frente a la barbarie”, al tiempo que pidió que no se haga utilización política de los actos de conmemoración del golpe.
Este contenido no está abierto a comentarios