Monchi Cantero: “Soy un chivo expiatorio”
El acusado de liderar a Los Monos e instigar crímenes dijo que la causa que se juzga es un armado político.
Ramón Ezequiel Machuca, o “Monchi Cantero”, como es conocido, hizo ayer a la mañana uso del derecho que le asiste y declaró ante el Tribunal que lleva adelante el juicio oral y público a la banda de Los Monos y que lo tiene en el banquillo junto con otras 24 personas acusadas de integrar una asociación ilícita dedicada a la comisión de delitos varios. Siguiendo la línea de sus defensores, que en los alegatos expuestos el miércoles se centraron en el contexto político de la causa y en la figura del juez instructor Juan Carlos Vienna, ayer “Monchi” habló durante poco más de cinco minutos consciente de la tribuna de periodistas que seguía atenta sus palabras. Se definió a sí mismo y a su familia como “chivos expiatorios del socialismo” que gobierna Santa Fe y arriesgó vínculos entre el poder político, el judicial y el narcotráfico.
La jornada de ayer fue la tercera de un juicio que, se prevé, se extienda hasta abril del año próximo. Comenzó poco después de las 9 y estuvo dedicada íntegramente a que los acusados que lo desearan hicieran uso de su derecho y declararan ante el tribunal. Los primeros en hacerlo fueron los policías Diego Cárdenas y Hernán Herrera. Luego fue el turno de la ex pareja y madre de los hijos del asesinado Claudio “Pájaro” Cantero, quien fue reprendida varias veces por el presidente del Tribunal, Ismael Manfrín, por no respetar las formas y dejó su declaración por la mitad.
El cuarto en hacer uso de la palabra fue Machuca. “Quiero contar un poco cómo se inicia esta causa”, dijo el hombre de 34 años detenido desde junio de 2016, tras permanecer prófugo tres años y para quien la Fiscalía pidió una pena de 41 años de prisión por considerarlo instigador de cuatro homicidios y ser jefe de la asociación ilícita.
“Una respuesta política”
“Cuando el diputado (Andrés) Larroque trató de narcosocialismo al gobierno de esta provincia, la respuesta política fue armar una causa para demostrarle a la sociedad que nosotros somos el mal de la provincia y que yo vendría a ser el monstruo más grande que hay, como siempre me pintaron”, dijo.
“Monchi” habló de un “pacto político” entre el socialismo santafesino, el juez Juan Carlos Vienna, Luis Paz (padre de Martín «Fantasma» Paz, cuyo asesinato en septiembre de 2012 derivó en la causa que hoy se dirime en juicio oral y público) y la División Judiciales de la policía, a los que agrupó bajo el nombre irónico de “los cuatro magníficos”.
“La primera vez que yo me muestro en televisión fue en el programa de Rolando Graña. Apenas salió la nota (el 4 de abril de 2014) salen las declaraciones del señor (Antonio) Bonfatti, que en ese momento era gobernador. Sale a decir: «¿Cómo le van a creer a un prófugo de la Justicia, a un narcotraficante?», cuando yo, con mis 34 años, no tengo ni una causa por narcotráfico”, esgrimió Machuca.
Luego lanzó dos acusaciones sin dejar en claro si sus dichos serían probados o no a lo largo del debate. Primero espetó que Bonfatti tuvo una especie de trato comercial con el asesinado narco Luis Medina por dos autos que estaban a nombre del ex gobernador. Después dijo que si hubiera pagado el millón de pesos que le pedían desde la División Judiciales hoy no estaría siendo sometido a juicio ni hubiera permanecido prófugo tres años.
Abreviado
En su alocución, “Monchi” se dijo sorprendido por el monto de pena solicitado para él por el fiscal Gonzalo Fernández Bussy, quien pidió que fuera condenado a 41 años de prisión.
“Cuando se hicieron todos los abreviados, a mí me mandaron a decir (desde la Fiscalía) que me presentara y accedía a un abreviado de siete años. Y anteayer (el lunes) escuché el disparate de 41 años. Me parece que ni a Robledo Puch le dieron tantos años como los que me está tirando el fiscal”, dijo.
Trámite abreviado
El juicio abreviado al que hizo referencia había sido acordado entre los abogados de Los Monos y los fiscales Guillermo Camporini, Cristina Rubiolo y Gonzalo Fernández Bussy en mayo de 2015, y establecía penas de tres años para la mayoría de los acusados que admitían pertenecer a la banda. Pero a tres de ellos, también procesados por el crimen de Diego Demarre (ocurrido el 27 de mayo de 2013 como venganza por el asesinato de Claudio “Pájaro” Cantero) se les imponían condenas superiores: nueve años para “Guille” Cantero y ocho para Leandro Vilches y Emanuel Chamorro.
El acuerdo fue admitido por el juez de Instrucción Luis María Caterina, que lo remitió a su par de Sentencia Edgardo Fertitta para su homologación. Este lo analizó junto a José Luis Mascali y Julio Kesuani, quienes admitieron el trámite para once imputados pero rechazaron las penas propuestas para los implicados en el crimen de Diego Demarre porque no fundamentaba por qué cambiaba la calificación del delito atribuido a “Guille”, que pasaba de estar acusado como autor material del homicidio a ser condenado como partícipe secundario del mismo delito.
El fallo fue apelado y el camarista Daniel Acosta también rechazó el acuerdo por falta de fundamentos, objetó la nulidad dictada por sus antecesores y declaró la “inadmisibilidad” del procedimiento, que se aplica cuando un acto de partes no cumple con requisitos formales. Entonces, el trío presentó un recurso de queja ante la Corte Suprema de Justicia santafesina, que lo rechazó.
“No hubo ningún ofrecimiento”, dijo ayer la fiscal María Alejandra Ruiz después de la declaración de “Monchi”. “El señor Machuca está detenido desde el año 2016. En ese momento fue la primera vez que se lo indagó y se lo imputó por los delitos por los que se lo trajo a juicio. Nunca hubo un ofrecimiento de juicio abreviado, ni siquiera informal. Estamos hablando de 2016 y los abreviados se firmaron antes. Y con respecto a los 41 años de prisión que se piden ahora, la Fiscalía en el transcurso del juicio mostrará las pruebas y en los alegatos de clausura fundamentará el pedido de pena”, enfatizó la fiscal.
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