Para un juez, el matrimonio gay va contra los derechos del niño
El Senado llevó adelante ayer una nueva jornada de debate del proyecto que permitiría el matrimonio entre personas del mismo sexo, en una reunión de comisión en la que abundaron las críticas a la iniciativa.
En el Salón Arturo Illia, la Comisión de Legislación General recibió, entre otros, al juez de la Cámara Civil Mauricio Mizrahi, quien declaró espera que el Senado "no apruebe" el proyecto porque, según dijo, "genera la procreación de niños mutilados en la mitad de su ascendencia, un niño criado en un matrimonio homosexual no va a tener madre o no va a tener padre".
"Ha sido un gran error la aprobación que ha hecho la Cámara de Diputados, porque ha hecho una suerte de identificación entre la pareja homosexual y heterosexual cuando ambas son muy diferentes", agregó esta mañana Mizrahi, en diálogo con Oscar González Oro por Radio 10.
En ese sentido, explicó que si bien considera que el Congreso tiene una "deuda" con la comunidad homosexual y que es necesario reconocer los derechos de las parejas del mismo sexo con una ley de unión civil nacional, "no se puede hacer una identificación, hablar de matrimonio en la pareja homosexual, porque ahí entonces afectamos los derechos de terceros que son los niños, la humanidad en ascenso".
Mizrahi remarcó que teme que una modificación del Código Civil de este tipo determine "una expansión inusitada de la procreación asistida heteróloga", en consecuente perjuicio de las generaciones venideras.
Entre los presuntos problemas que enfrentaría el menor se encuentran la maternidad o paternidad "desfigurada, desdoblada en dos figuras", que generaría en él una "amputación" de la "mitad de su ascendencia", explicó el juez de la Cámara Civil.
"Nosotros tenemos una ley, que es la ley del niño, la 26.061, que (dice que) por más derecho que quiera invocar el adulto a querer procrear, cuando entra en conflicto con los derechos de los niños deben prevalecer estos últimos. Y un niño tiene derecho a nacer con un padre y con una madre", sostuvo Mizrahi.
Otras opiniones en contra
Eduardo Sambrizzi, de la Corporación de Abogados Católicos, coincidió ayer con Mizrahi frente a los senadores de la comisión, cuando afirmó que "tener dos madres o dos padres viola los derechos del niño".
Además, advirtió que "a la sociedad no se la ha consultado sobre el tema y no se puede legislar a espaldas del pueblo. Esto es lo que se está haciendo con el proyecto".
Por su parte, el titular de la Asociación de Abogados por la Justicia y la Concordia, Alberto Solanet, señaló que si la iniciativa es aprobada el 14 de julio, lo que resulte de ella "será cualquier cosa, pero no matrimonio".
"El bien común depende de las familias formadas por matrimonios. Con la aprobación de este proyecto no se evita la discriminación, sino que se tortura la realidad y se producirá un quiebre en la médula de la sociedad argentina", concluyó Solanet.
A su turno, Francisco Roggerio, en representación del Colegio de Abogados de la ciudad de Buenos Aires, sostuvo que algunos estudios indican que "las parejas homosexuales son inestables", e interpeló a los senadores: "Les pido se pregunten, si tuviesen un accidente, si les darían sus hijos a una pareja homosexual".
Por la tarde se dio la exposición más extensa, que estuvo a cargo de la jueza federal Graciela Medina. Ella advirtió que estaba de acuerdo con el casamiento entre personas del mismo sexo pero no con la letra del proyecto, a la que calificó como una "improvisación legislativa".
"Para permitir el matrimonio homosexual hay que cambiar la esencia de las instituciones, no se puede dejar esta ley librada al azar", señaló Medina, quien advirtió, en primer lugar, que el proyecto "elimina a la mujer al hablar de padres y de contrayentes".
También recalcó que "el progenitor biológico está obligado a reconocer al menor" por lo que el proyecto debería explicar "cómo ejercer la patria potestad de a tres" en caso de que el niño sea adoptado por una pareja homosexual.
"Todos tenemos que tener los mismos derechos. Entonces, ¿por qué las mujeres homosexuales van a tener el derecho de dar su apellido a los hijos y las mujeres de matrimonios heterosexuales no?", interrogó la jueza.
Medina señaló que "los siete países que admitieron el matrimonio homosexual, antes hicieron reformas serias".
La magistrada argumentó que "está bien se hagan modificaciones, pero tienen que regir para todos, no sólo para los homosexuales", y concluyó: "Tengo esperanza de que el Senado sancione una ley de matrimonio que proteja los derechos humanos de todos y todas".
En la misma línea, el titular del Juzgado Nacional en lo Civil n° 85, Félix Igarzábal, pidió que la ley "sea clara" y sostuvo que "es importante que los legisladores devuelvan el proyecto (a Diputados) porque que no se lo está cuidando".
La titular del Juzgado Nacional en lo Civil, Martha Gómez Alsina, señaló que tanto la legislación nacional como los tratados internacionales refieren al matrimonio como la unión entre "hombre y mujer", y que al modificar esto "el Estado estaría incumpliendo un tratado".
"El Estado no puede justificar el incumplimiento de un tratado equivocando el derecho interno de su país. Sancionando en estos términos la reforma estaríamos lesionando este derecho y podríamos decir que el Estado y la sociedad no están protegiendo debidamente a la familia", afirmó.
A fines de la semana pasada, la comisión presentó el debate en las provincias de Chaco, Corrientes y Salta, y hoy, luego de una nueva reunión a las 10, los senadores se trasladarán a Catamarca y Tucumán.
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