ROSARIO: DENUNCIARON A UN PATOVICA POR BRUTAL GOLPIZA A UN MUCHACHO
Un joven de 19 años denunció que fue golpeado con brutalidad por un patovica en la puerta de un boliche del centro de la ciudad durante la madrugada de ayer. El muchacho fue atendido en el hospital Provincial, donde le dieron el alta poco después. Y el custodio quedó demorado en la comisaría 3ª acusado de lesiones leves.
El suceso ocurrió cerca de las 2 de ayer en Urban, una discoteca ubicada en Tucumán al 1100, cuando el muchacho golpeado, Leonardo Jesús Rosellini, planeaba ingresar junto con un primo y cinco amigos al local. La agresión se consumó, según contó el familiar del pibe golpeado, sin que hubiera un incidente previo entre el custodio y el muchacho. “No sé por que reaccionó así”, comentó sorprendido ayer a la tarde Arístides Rosellini, primo de Leonardo, al recibir a La Capital. El joven aclaró que concurren con frecuencia a Urban y que nunca habían tenido inconvenientes.
“Estábamos en la puerta del boliche. Vino el custodio y sin mediar palabras le pegó una trompada sin ningún motivo a mi primo. En ningún momento nos dijo que no podíamos entrar”, contó Arístides, frente a la casa donde vive el pibe atacado.
Después se sucedieron puñetes y patadas que, asestadas por el agresor y un presunto agente de policía que estaba de custodia, dieron, según dijo Arístides, de lleno en la cabeza y en el rostro de Leonardo. “Le pegaron el patovica y un policía”, aseguró.
En un primer momento, ante el temor de que a él también lo agredieran, el primo de Leonardo se alejó de la escena, pero después regresó para auxiliar a su pariente. “Llamé al Comando, pero me dijeron que tenía que llamar al Sies”, recordó Arístides.
Un rato después, una ambulancia trasladó a Leonardo al hospital Provincial, donde los médicos le colocaron una prótesis para inmovilizarle el cuello. Un vocero de ese centro asistencial señaló que Leonardo dejó el hospital por “sus propios medios” tras recibir el alta y aseguró que presentaba traumatismo de cráneo y politraumatismos en distintas partes del cuerpo.
Tras ser atendido en el centro asistencial, Leonardo debió concurrir a la comisaría 3ª para prestar declaración. Una fuente policial indicó que el muchacho fue acusado de amenazas a raíz de que el patovica -identificado como Sergio Alberto C., de 30 años- sostuvo en sede policial que el pibe lo “amenazó de muerte”.
En tanto, el custodio quedó demorado imputado de lesiones a disposición del juzgado Correccional de turno. Arístides contó que su primo trabaja como albañil con su padre, con quien vive en una humilde casa del barrio La Plata.
Ayer a la tarde, muchos pibes de la barriada parecían conocer el incidente porque, según ellos, habían estado bailando durante la madrugada de ayer en Urban.
Este contenido no está abierto a comentarios