SANDRO INICIA HOY UNA SERIE DE TRES RECITALES EN EL TEATRO EL CÍRCULO

Tras un breve paso por el hotel en el que se aloja, cuando ya los músicos habían comenzado a afinar sus instrumentos y a realizar la primeras pruebas de sonido, a las 20, todo vestido de negro, rodeado de custodios y sonriente, Sandro ingresó al teatro El Circulo por las puertas de calle Laprida.

Sandro llegó ayer a Rosario para concretar los ensayos de los recitales con los que hoy, las 21.30, celebrará sus 40 años de trayectoria.

Unas pocas admiradoras advertidas de la llegada y un buen números de camarógrafos, fotógrafos y periodistas se ubicaron al acecho del artista frente a todas las entradas de la sala, pero el ingreso de Sandro fue lo suficientemente rápido como para evitar todo contacto con admiradoras o periodistas. Una vez dentro del teatro, el artista se dirigió a los camarines para dialogar con los responsables locales de la puesta y su manager, el rosarino Aldo Aresi, mientras los músicos ensayaban el bolero “Besame muchos”, casi sin escenografía a la vista.

Una propuesta diferente
Sandro, que se presentará además mañana y el domingo, ideó una puesta diferente a sus habituales shows. Además de un recital en el que recordará sus más exitosas creaciones, el Gitano estrenará “La profecía”, un musical escrito junto a Marcos Carnevale, ambientado en el mundo de los gitanos, para el que presentará algunos temas nuevos y en el que contará con la colaboración, en el plano actoral, de Rita Cortese y Matías Santoiani.

Una escenografía que arribó el martes, catorce músicos liderados por el pianista Sebastián Giunta, tres cantantes femeninas y seis bailarinas se instalarán en el escenario mayor de Laprida y Mendoza, para esta serie de presentaciones que continuarán luego en el teatro Gran Rex de la Capital Federal.

Fuentes de la producción del espectáculo señalaron que suman 60 las personas que entre allegados, colaboradores personales, artistas y técnicos acompañarán a Sandro en Rosario este fin de semana.

“Traten de no perderse este espectáculo, porque les aseguro que Sandro está en su mejor momento”, expresó a La Capital el actor Matías Santoiani, quien interpreta al gitano Tiago en “La profecía”, el musical teatralizado que Sandro estrenará esta noche y en el que, según el actor, se conocerán nuevos temas del cantante.

Santoiani fue uno de los primeros colaboradores de Sandro que, en horas del mediodía, llegó a Rosario junto a un reducido grupo de privilegiados de la compañía que compartirán el mismo hotel que el cantante.

La actriz del elenco, Rita Cortese, confirmó lo dicho por su compañero, pero también se negó a brindar datos más precisos “porque queremos que sea una verdadera sorpresa. Por lo pronto puedo decir que Sandro intercalará sus canciones más exitosas con su participación en esta puesta”.

Cortese, que tuvo una destacada actuación en el ciclo unitario “Sol negro”, consideró que haber sido elegida por Sandro para esta puesta colma sus aspiraciones, “ya que en mi admiración por todo lo hecho por Sandro como cantante nunca imaginé que alguna vez iba a compartir un escenario con él”.

La condición de astro no lo obliga a exigencias desmedidas al cantante. “La única exigencia que siempre tiene Sandro en materia de comidas -explicó Alberto J. Llorente- es que quiere tener en la mesa, antes de los platos principales, una entrada con quesos y fiambres, y entre estos últimos, especialmente salame. Por lo demás, no es exigente. Gusta de las pastas y a veces pide algún plato de comida china, pero es realidad es muy raro que quiera platos muy sofisticados. Cuando no tiene nada decidido, como cualquiera, le pide a los mozos que le sugieran algo y listo. En cuanto a las bebidas, sólo consume lo normal en una comida; apenas un par de copas de vino tinto. Ultimamente pide vinos de la marca Felipe Rutini”

El empresario artístico señaló también que es costumbre de Sandro contar con algún ramo de rosas como elemento decorativo en su habitación, y que en el teatro solicita un servicio de catering compuesto por “una bandeja de sandwiches, una de canapés, agua mineral y una botella de champaña”.

Las expectativas por la llegada de Sandro no se circunscribieron al ámbito del hotel, el teatro o los responsables del show. María Elena Navarro, líder de la falange de 200 mujeres que integran el Club de Admiradoras de Sandro, manifestó a La Capital su pena por no poder asistir a la llegada de su ídolo por razones laborales. María Elena explicó a La Capital: “Nosotras no somos un club de fans; no nos instalamos en el hotel asediando y molestando a nuestro ídolo. Somos un Club de Admiradoras, reconocido por Sandro, al que jamás molestamos. El nos atiende cuando viene a Rosario y somos de las que participamos cada 19 de agosto de su cumpleaños en su mansión de Banfield.