Copa Sudamericana
Unión perdió 1 a 0 ante Mushuc Runa en el 15 de Abril
El Tatengue sumó su segunda derrota consecutiva como local y quedó sin chances en el Grupo E. Otro gol sobre el cierre y una imagen preocupante de cara al segundo semestre.
Unión se quedó sin Copa y sin respuestas. En una noche cargada de impotencia y frustración, el equipo de Leonardo Madelón perdió 1-0 frente a Mushuc Runa en Santa Fe y selló su eliminación de la Sudamericana, con dos derrotas al hilo en su casa.
Y así, con una derrota en casa, sin gol, sin reacción y con esa imagen que empieza a volverse costumbre, Unión le dijo adiós a otra competición. Un paso internacional que arrancó con expectativa, terminó en silencio y dejó una sensación: esto no dio ni para susto.
El gol de Mushuc Runa llegó cuando moría el primer tiempo y Unión ya había intentado todo para romper la igualdad. Caicedo se disfrazó de goleador y festejó como Bellingham, enterrando las ilusiones rojiblancas.
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Ni los centros de Vargas, ni las corridas de Profini, ni las combinaciones de Colazo y Gamba alcanzaron para evitar otra frustración.
Luces entre la oscuridad
Verde volvió a demostrar que tiene otra lectura del juego, que ve espacios donde otros ven piernas. Profini no se escondió nunca, siempre quiso la pelota. Entre ellos se gestó lo mejor de Unión. Vargas levantó su nivel y Del Blanco también dejó cosas interesantes. Si Colazo convertía una de las muchas que tuvo, hablábamos de otra historia.
Debut alentador
El "Pochito" Lavezzi tuvo su primera vez en la Primera. Mostró ganas, personalidad, algo distinto en un equipo que necesitaba aire fresco. De lo poco positivo que deja la noche.
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El resto, en deuda
Estigarribia volvió a errar un gol hecho. Gerometta entró y casi regala un gol. Pardo y Fascendini, al límite, sin poder con los delanteros rivales. Cardozo sigue sin transmitir seguridad. Fragapane, una vez más, desaparecido.
Unión se quedó sin Sudamericana y lo hizo con una imagen que preocupa: sin juego, sin ideas, sin gol y con pocas respuestas.
Lo que viene no es menor. Lo que viene es reconstruir un plantel y una confianza que parecen haberse ido con el último silbatazo.