Otra vez problemas
Wanda Nara incumple orden judicial

La justicia ordenó que las hijas pasen una semana con Mauro Icardi. Wanda exige un papel que impida que salgan del país y garantías de contacto
A las 11, en el Chateau Libertador de Buenos Aires, la policía llegó al departamento de Wanda Nara para que entregue a sus dos hijas a Mauro Icardi por orden del juez; Nara se negó y exigió garantías por escrito de que las niñas no saldrán del país y podrán comunicarse con ella.
La diligencia judicial fue dispuesta para que las niñas pasen una semana con su padre antes de su regreso a Turquía para sumarse a la pretemporada con el Galatasaray. Icardi acudió con sus abogadas Lara Piro y Elba Marcovecchio, y con la representante del Ministerio Público Tutelar, Fernanda Mattera.
Al llegar, los policías presentaron una intimación que el juez Hagopian había firmado. Exigía la entrega de las menores en media hora o la intervención directa del magistrado.
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En el lugar, Nara sostuvo que las niñas “no querían ir” con su padre ni convivir con la actual pareja de Icardi, China Suárez. “No van a la casa de su padre ni a la de la China”, aseguró la empresaria.
A las 15.46, dos patrulleros con tres oficiales ingresaron y bajaron al primer subsuelo, donde aguardaba Icardi. Se reunieron con la seguridad privada para evitar enfrentamientos.
Algunos testigos afirmaron que las niñas descendieron acompañadas por Mattera, pero se negaron a subir con su padre. Llevaban sus mochilas y bolsas con pertenencias listas para el viaje.
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Un periodista leyó el ultimátum en vivo: “Si no entregas en media hora a las nenas, viene el juez”. La noticia provocó tensión entre vecinos y en redes sociales.
Quienes presenciaron el episodio relataron que Wanda “hizo un teatro tremendo”, grabó cada paso y afirmó que todo favorecía a Icardi para la restitución internacional.
Otra versión aseguró que la mayor de las niñas recordó un viaje anterior. “No me sentí cómoda en la casa de mamá de la China”, dijo la niña al negarse a bajar con su padre.
La tensión escaló cuando Nara mencionó que viajaría a Miami. Sostuvo que las niñas solo saldrían con un documento que impida sacarlas del país y un plan de comunicación.
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En Intrusos, una comunicadora explicó que Icardi estaba enojado y ansioso por llevarse a sus hijas. Afirmó que las niñas “están muy ansiosas” por pasar los días con su padre.
La causa quedó a cargo del fuero de familia. Se espera la llegada del juez para zanjar la entrega. Hasta entonces, Icardi permanece en el subsuelo, custodiado por la policía.
Este nuevo capítulo legal sumó otro episodio al conflicto mediático entre Wanda Nara y Mauro Icardi, que reaviva el debate público sobre la protección de los derechos de los menores en procesos de restitución internacional.